Banners

Destacar los edificios mediante un banner 3D, una tendencia que se generalizó a principios de los años 1990, constituye un excelente medio de valorizar su imagen de marca. Puede ser neutro o llevar su logotipo, y por supuesto debe poder adaptarse a las diferentes dimensiones de los emplazamientos de su red. Con independencia de que se trate de una versión iluminada o no, este tipo de revestimiento tiene muchas ventajas. Es económico y permite transmitir su identidad corporativa desde el exterior, sin tener que alterar la naturaleza del edificio que la alberga. Debido a su dimensión (hasta varias decenas de metros), la gestión de la iluminación es un elemento importante del diseño de este rótulo. En efecto, es esencial que la difusión de la luz se controle minuciosamente a lo largo de todo el banner.